Gente corriente.
Este domingo disfruté leyendo la revista "Mujer Hoy" al encontrarme con pesonas tan extraordinarias como Elena Ochoa Foster, editora exquisita, mecenas apasionada, descubridora de talentos (así la definen), y con el científico español más citado de la Historia, la gran referencia mundial en Cardiología, que a sus 77 años sigue trabajando con una actividad que muchos la quisieran para si, el Doctor Valentín Fuster.
Entro de lleno en los artículos y mientras más iba conociendo a los personajes más me daba cuenta de lo corrientes que eran.
Personas que se habían formado bien, con talento, honestidad, sencillez y mucho sentido común.
Elena Ochoa opina, entre otras cosas, "que nuestras debilidades como país son la ausencia de tolerancia, la desconfianza hacia los que no ven la realidad con los mismos prismáticos, la crítica divisoria...".
Valentín Fuster que "todo tiene que ver con el método, si no hay método , hay estrés. Yo funciono siempre con una semana de antelación. Lo fundamental es saber cuál es tu talento. El máximo estrés lo he visto en pesonas haciendo cosas que no querían".
Realmente no son personas tan extraordinarias, son gente corriente con un gran sentido de la responsabilidad, del honor, del saber hacer, del reconocimiento del trabajo bien hecho..., en fin, lo que la mayoría de las personas hacen de su vida día a día.
Llegar a donde ellos están se lo han ganado a pulso, con mucha formación, dedicación, con estudio y pasión.
Eso es lo que nos han enseñado toda la vida. Entonces, ¿por qué me causan tanta extrañeza?
Los valores están cambiando tanto que lo que era corriente, hoy se ve como extraordinario.
Me gustaría que los jóvenes se dieran cuenta de la importancia de ser coherente con lo que se dice y con lo que se hace.
Estamos en un momento en el que se da valor al que llega sin mérito alguno,al que miente, al que no tiene escrúpulos, a los que intentan hacerse oir,gritando y amenazando, a la mala educación.
Somos "gente corriente" los que circulamos a diario por las calles, intentando hacer de nuestras vidas nuestro mejor tesoro, la palabra dada, el respeto a los demás, el saludo, el saber estar, la buena presencia...la educación, en definitiva.
Por favo, sigamos siendo "corrientes", que nos guste escuchar, cambiar impresiones, respetar las opiniones contrarias, divertirnos, tener ilusiones.
Ahora se acerca el 8 de Marzo, "Día de la mujer".
Eduquemos en valores, tanto a los niños como a las niñas. Así es como conseguiremos esa igualdad tan deseada por TODOS.
Demonizando a los hombres no se consigue más que odio, separatismo y,¡ya está bien!.
Lleguemos a casa, a ser posible, "no borrachas", es algo por lo que luchamos los padres, y si puede ser, bien acompañadas. Ese debería ser el lema de ese día, y no "otro".
Un "ole" por todas la mujeres que saben también valorar al hombre, porque son inteligentes. Serán el día de mañana madres de ellos, hermanas, tías, amigas...
Paz y amor, señoras diputadas, que les recuerdo que son hijas de sus padres, no hay otra forma de existir.
