Las bicicletas son para el verano.
Verdaderamente para mi, las bicicletas son para el verano.
Es en la única época del año que la utilizo, y en la playa. Me sirve para hacer ejercicio y para relajarme paseando por los estupendos parajes que tenemos allí donde yo veraneo. Una amiga y yo nos aventuramos a descubrir todos los años sitios nuevos aunque algunas veces nos haya costado algún que otro susto.
Hoy en día, con el carril bici es verdad que se utilizan durante todo el año, y me parece estupendo. Yo prefiero andar.
Con esto hago una comparación con las vacaciones y el descanso.
¿Cuántos esperamos estos días de asueto para hacer todo lo que no hemos podido hacer el resto del año?
Hacemos grandes listas, nos proponemos desconectar, viajar, descansar, ir de fiesta, quedar con amigos, estar con la familia.....
Verdaderamente una barbaridad.
Si las bicicletas las puedes disfrutar durante todo el año, ¿por qué dejarlas solo para el verano?
Si podemos también, en pequeñas dosis, hacer todo lo que nos proponemos para estas vacaciones el resto del año, ¿por qué demorarlo solo para estas fechas?
Llegamos a ellas agotados, asfixiados, con ansiedad, que conlleva a veces a que en los primeros días todavía no se haya desconectado y provoque encontronazos con el resto de la familia.
Mi propuesta sería que las vacaciones se pudieran disfrutar a lo largo de todo el año. Con esa misma mentalidad que se llega a las de verano, lleguemos a las de los fines de semana, al tiempo de descanso de todos los días, a los ratitos libres que se puedan tener.....
Si así lo hiciéramos, que se puede, estaríamos más sanos y menos estresados.
Cojamos la onda de todo lo que somos capaces de hacer en estas vacaciones, o de no hacer, y trasladémosla a aquellos momentos en los que tenemos dos días, o unas horas, o simplemente un momento. Estoy segura que la vida cambiaría a mejor.
Así y todo, me voy unos días de vacaciones y espero hacer cosas y también a no hacer nada. Lo digo todos los años, y funciona.