"... apasionados de la palabra, de los sentimientos... De todo aquello que hace que la vida sea mejor. Con gusto mediador"
Hola:
Somos Sebastián García y Carmen Sánchez, y en esta segunda etapa de nuestras vidas surge la idea de crear "Con Actitud y Media". Psicólogo y abogada que tienen como nexo en común la pasión por la mediación, la ilusión de hacer que la vida sea mejor con la palabra y la cultura del acuerdo.
Este es nuestro momento de "desaprender para aprender", como tantas veces nos ha dicho nuestro querido Javier Alés Sioli, y nos encantaría compartirlo con todos vosotros, con toda la ilusión del mundo. Intentaremos desde una frase diaria, comentar, contar... reflexionar en definitiva para hacer que "cada día cuente". Contaros también nuestros logros y nuestros avatares. Os esperamos.

lunes, 28 de diciembre de 2015

28 de diciembre de 2015
El año nuevo y sus tradiciones.


Entramos ya en la última semana del mes, en sus últimos días. Se va el año 2015. Para algunos ya estaba tardando. Año complicado, de crisis, de cambios y de mucho suspense. 
Pero ¿sabemos de dónde viene el que celebremos el día 1 de enero como el primero del año?
Si nos vamos al calendario romano, el primer día del año era el primero del mes de marzo. Fue Julio César el que creó el calendario juliano, dedicando el 1 de enero a Jano, dios de "las entradas, las puertas y los comienzos". De él recibió nombre el mes de enero. Dios con dos caras, una que miraba hacia adelante y otra que miraba hacia atrás.
Con algunas modificaciones hechas posteriormente, llegamos a la realizada por el papa Gregorio XIII en el siglo XVI, llamándose calendario gregoriano, teniendo ya un significado religioso durante la Edad Media.
Con la entrada del año nuevo, cada país cumple una serie de tradiciones.
La más sonada en el nuestro es la de comernos las doce uvas, y también ésta tiene un porqué.
Se piensa que tuvo sus orígenes en Elche, en 1909, año en el que unos vitivinicultores de la comarca alicantina del Bajo Vinalopó la iniciaron para dar salida a un excedente de cosecha. Desde entonces comerse las tradicionales doce uvas al compás de las doce campanadas del reloj de la Puerta del Sol en Madrid viene siendo un clásico ya. 
Interesante es saber de dónde vienen todas estas tradiciones que llevamos haciendo un año tras otro,con la certeza de que si no se hacen tendremos un año de mala suerte. El anillo en la primera copa de cava o champán, la ropa interior roja, tirar cohetes, disfrazarse......
El último día del año, el 31 de diciembre,
con el que cerramos una etapa, es el día en el que se suele hacer balance de lo vivido en el mismo. Intentamos ver lo que no nos ha gustado del él para no volverlo a repetir, nos hacemos nuevos propósitos, promesas, proyectos.....
Es como si nos renováramos, nos hiciéramos una limpia, y empezáramos de nuevo, un renacer. Una segunda oportunidad para muchas cosas que hay que aprovechar.
Quiero, en este nuestro último artículo del año, desearos una feliz entrada de año, pero también una feliz salida del mismo. Al igual que el Dios Juno,que tengamos dos caras, que sepamos mirar hacia atrás, con sensatez y sentido crítico, y hacia adelante con ilusión renovada y con la inteligencia suficiente para saber que podemos conseguir lo que nos propongamos si realmente lo deseamos, pero que también somos humanos, y que como tales tropezaremos de nuevo en la misma piedra. Pero a levantarse toca y a continuar.





Feliz año, y hoy "cuidadín" con las bromas, que es día de los Santos Inocentes, otra tradición nuestra digna de conocerse.
Hasta el año que viene amig@s.




lunes, 21 de diciembre de 2015

21 de diciembre de 2015
El espíritu de la Navidad.




Se dice que el mejor regalo es el recuerdo y estoy completamente de acuerdo. Tener recuerdos gratos y poder rememorarlos es todo un placer.
Las Navidades me gustan mucho y, si cabe, más las que disfrutaba de pequeña. Olores que me llevan a esos momentos infantiles, llenos de luces, un nacimiento con huerto y muchos pastores, y un cielo azul lleno de estrellas, y sus montañas de corcho, el pavo. los mantecados....
La ilusión por los regalos, la espera por ver los Reyes, que mi preferido era el negro, el salir a ver belenes,
sus villancicos, las castañas, y las meriendas con churros y chocolate.
Ahora veo unas Navidades distintas, gente con mucha prisa y cargadas de bolsas, familias en los Mc Donalds, muchos árboles y pocos belenes, algún que otro tímido villancico, y.....muchos, muchos regalos.
Pasamos la mitad de las vacaciones pensando qué comprar y la otra mitad comprando, regalos que después pasamos otro tanto descambiando.
"El mejor regalo eres tú", es un eslogan que corre por las redes sociales. Me parece fantástico, ¿para qué marearnos buscando y rebuscando, cuando lo tenemos tan cerca, en nosotros mismos?
¿Qué mejor regalo para un padre o una madre que sus hijos se propongan hacer algo que llevan todo el año intentando que hagan?, por ejemplo.
O, ¿qué mejor para un hijo que el dedicarle ese tiempo que estás perdiendo en buscar el regalo perfecto, y llevarlo a ver aquello que lleva diciendo querer ver hace tanto tiempo y que por falta de éste no habías podido hacerlo aún? O también, ¿por qué no, un regalo de una tarde de risas, de una merienda especial, o simplemente de pasar un buen rato hablando?
Hay tantos deseos que no cuestan nada y que son más o tan importantes como un regalo al que te matas buscando.
Yo, si por mi dependiera, llenaría esos paquetes de ilusiones, compañía, pequeños momentos, risas,
besos......y algún que otro capricho.
El espíritu de la Navidad, eso es para mi verla con los ojos de niños, la ilusión de la primera vez, el tiempo en familia, la sensación de bienestar, de encontrarte haciendo aquello que te apetece, sin prisas. 
Os deseo una semana así, llena de ilusiones y de buenas sensaciones, y aprovechemos la iluminación, los puestos de castañas, la música navideña, la compañía de todos a los que queremos, y sobretodo, la posibilidad de ser felices, eso,en definitiva, debería ser lo más importante.
FELICES FIESTAS Y FELIZ NAVIDAD A TODOS

martes, 15 de diciembre de 2015

16 de diciembre de 2015
De los peluches a los robots.


Un robot humanoide es un robot diseñado para asimilar el cuerpo y los movimientos de un ser humano. Están dotados de aspecto antropomórfico y funcionalidades humanas.
En poco tiempo tendremos disponibles robots parecidos a los humanos pero la diferencia importante es que para crearlos se combinan diversas disciplina como son la mecánica, la electrónica,la informática, la inteligencia artificial, la ingeniería de control y la física. 
Habrá robots para todo, e incluso para hacer trabajos que ahora hacemos "todavía" los humanos. Seguramente la perfección de ellos hará que sean demandados para ocupar el sitio de una "simple" persona. 
Esta tecnología está dando pasos agigantados para demostrar las destrezas de la misma en entornos cotidianos, como por ejemplo la asistencia a ancianos, el entrenamiento terapéutico, el suministro de fármacos a enfermos o la vigilancia de niños en casa.
Dicen que imitan casi hasta el extremo a los seres humanos y en no pocas ocasiones los remplazan.
Cuando escuché esta noticia, que en principio pudiera ser un gran adelanto de la ciencia y por ello algo que celebrar, me entristeció profundamente.
Quien me conoce sabe que no soy muy fans de las altas tecnologías. Pienso que algunas son muy necesarias y sería absurdo no reconocer que la vida resulta más fácil con muchas de ellas. Pero sin embargo, mucha parte de nosotros se pierde también con ellas. Estamos tan asfixiados de máquinas que perdemos el control, y nos vamos acostumbrando a interactuar con ellas abandonando la naturalidad de hacerlo con las personas.

Para ejemplo un botón, whatsap, facebook, móvil, ordenadores.....fantásticos, bien utilizados y en principio para servirnos. Lo malo es que al final terminamos siendo sus esclavos, y haciendo que la relación con ellos sea más placentera que con los de nuestra especie, prefiriendo, en muchas ocasiones mantener una conversación vía whatsap, que una frente a frente con la persona.
Miedo me da, y se que no soy la única que piensa así, aunque al decirlo me tachen, como hace unos días un compañero al que le dije que me sigue gustando leer libros en papel, de retrógrada y de antigua.
De lo que estoy convencida es de que los sentimientos que podemos expresar los humanos será imposible que lo hagan ellos, por muy perfectos que sean. El calor, la sonrisa, la mirada, la ternura....eso es nuestro, por mucho que avancemos.
Ahora que se lleva tanto dar abrazos con masaje en la espalda incluido, ¿los cambiaríamos por los fríos dedos y mecanizados movimientos de un robot?
Yo seguiré con mi oso de peluche por si las moscas me llega la hora de tener que ser cuidada en el futuro por uno de ellos, la sensibilidad humana no es reemplazable por nada.

Ya en el meridiano del mes, a solo unos días de terminar el año.
Tiempo todavía para hacer aquello que nos propusimos el año pasado para éste, que no se nos pase la oportunidad de hacerlo.







jueves, 10 de diciembre de 2015

10 de diciembre de 2015
Para estar, hay que saber estar.


Si la vida fuera un viaje, nuestro mejor equipaje sería la buena educación. 
Y si de un fondo de armario habláramos, la prenda indispensable sería el saber estar, el saber comportarse en cada situación con clase y con estilo. Con solo esa prenda podríamos asistir a cualquier evento.
Sabemos que una buena película no solo consiste en tener un buen diálogo y una buena trama, también la luz, el decorado, el maquillaje y el vestuario hacen que nos llegue de verdad, que nos enganche, y que la consideremos una obra maestra o un simple pasatiempo.
Esto mismo me ocurre a mi con los políticos. Necesito ver en ellos además de buenas palabras, promesas, y todas sus intenciones, una buena presencia, un saber estar ante cada eventualidad, un comportamiento adecuado a la posición que pretenden.


La vestimenta no hace al monje, pero ayuda, y al igual que la mujer del César no solo tiene que serlo si no también parecerlo, los políticos un tanto de lo mismo.
Cada ocasión tiene una etiqueta, y lo mismo que no vamos igual vestidos a una barbacoa que a un cóctel por respeto hacia los demás, los políticos, sean del color que sean, deben de tenerlo también presente.
Hasta la persona más humilde tiene un traje para la ocasión, y sabe cuando tiene que ponérselo.
Entra dentro de ese saber estar el saludar con educación, saber tratar a los iguales y a los que son distintos a ti, aguantar igual de bien las alabanzas como las críticas, saber ganar y saber perder.
Estas reglas son indispensables para cualquier político que se precie, ya sea de derechas, de izquierdas, de España o de cualquier otro país.
El todo vale no me convence, ni tampoco lo de que los modales no son imprescindibles, que hay políticos que son como el pueblo llano......no, excusas. El que quiera peces que se moje el culo, como se suele decir. No se puede pretender ser Presidente de un gobierno y no tener un cierto decoro, no se puede poner al mando de un colegio a uno de los alumnos de primaria, y si se hace, corramos con las consecuencias.
Para todo,
pienso, hay que tener un badaje, un rodaje, un aprendizaje. Se dice que el demonio sabe más por viejo que por demonio, y es verdad.
Por eso digo, que para estar hay que saber estar, para mi, al menos, fundamental.

Buen final de semana para todos, y ahora que viene una época de regalos, aprovechemos y un libro nunca viene mal.

lunes, 30 de noviembre de 2015

30 de noviembre de 2015
Quiero ser un animaaaaaal.


Si hay algo de lo que no me canso es de ver los vídeos de animales jugando con otros animales. Pero lo curioso es que son animales que juegan con otros pero no de su misma especie, sino de otra completamente distinta y de la que nunca creerías que pudieran tener alguna relación.
Un orangután y un perro, un gato y un pollito, un mono y un caballo, un tejón y una tortuga, un elefante y una oveja......
¡Es que te enamoran!
Sin complejos ni tabúes, hacen lo que les pide el cuerpo, sin pensar si son o no compatibles, sin pensar si está bien visto o no que estén juntos, simplemente.....están, se quieren, se miman, se lo pasan bien y ya está.
Esto mismo  lo vemos con niños muy pequeños, cuando todavía no han sido manipulados por nosotros los mayores, los adultos, los civilizados, los educados, los que sabemos lo que hay que hacer y lo que es bueno y malo.
Lo que nos gusta de ellos es precisamente su naturalidad, su espontaneidad, el no pensar las consecuencias de sus actos y el disfrutar del "ahora", del momento, sin pensar en los demás y en el que dirán.
Por eso digo que "quiero ser un animal", para vivir el presente con todas las consecuencias, sin pensar en el futuro, pero tampoco destrozarlo. 
Ese es otro tema, el cuidado que hacemos de nuestro medio ambiente.
Tenemos todo a nuestra disposición y nos creemos los reyes del planeta, pensando que siempre va a estar ahí para nosotros, aunque no lo cuidemos, e incluso lo destrocemos con nuestro mal uso de las cosas. También deberíamos aprender de los animales, ellos lo usan pero saben  que lo tienen para poder vivir, y que muchas veces se ven abocados a salir de su hábitat porque nosotros con nuestros "tejes y manejes"  los dejamos sin esa posibilidad.
Deberíamos probar y ser más animales, dejar que nuestro raciocinio duerma durante un tiempo para dejar paso a nuestra sensibilidad, nuestra naturalidad, nuestra rama primitiva, haciendo de nosotros personas más felices y sin complejos.

Último día del mes de noviembre, ¡Dios mío! cómo pasa el tiempo, volando.....
Ya empezamos un nuevo mes, el de diciembre, el mes de los buenos propósitos, pues.......
no estaría mal empezar por éste y dejarnos llevar un poco por la magia de la navidad siendo más niños y si cabe más "salvajes".

lunes, 23 de noviembre de 2015

23 de noviembre de 2015
Del Calvo a Justino.





¡Ya huele a Navidad! Ha entrado el frío (¡que ya era hora!), apetecen las castañas, las calles empiezan a iluminarse y ....ya tenemos el anuncio de la Lotería.

Este año narra la historia de Justino, un guardia de seguridad en una fábrica de maniquíes, que nunca coincide con sus compañeros pero si con figuras humanas que son su compañía diaria.
Las ganas de compartir y la soledad en la que se encuentra hace que se establezca una bonita historia entre Justino, los maniquíes y sus compañeros del turno de día.
Entrañable corto de animación que consigue lo que se propone todos los años, y es sensibilizarnos en estas fechas tan especiales.
Este año ha sido Justino, el año pasado fue Antonio y Manuel, el dueño de un bar y uno de sus parroquianos, el anterior con la canción de "pon tus sueños a jugar", con el gran final de nuestro Raphael tan sonado durante todas las fiestas.
Anteriormente, el de "cazadores de sueños" donde estos cazadores recogen los deseos que la gente tiene en sus décimos de lotería de Navidad para meterlos en el bombo.
El anterior con "la fábrica de sueños" y....así
hasta llegar al año del "calvo de la Lotería", con lo de "que la suerte te acompañe".

Fantásticos anuncios que persiguen en estas fechas ponernos la piel de gallina, meternos en situación y hacernos ver la importancia de compartir y tener ilusiones.
A mi, particularmente, me encanta, creo que no podría haber una Navidad sin anuncio de la Lotería, tan nuestra. Es bueno ponernos sensibles, ver a los demás, tener ganas de ser felices, de regalar, de sonreirnos y felicitarnos......aunque sea por unos días.
Hace falta alegría, y más después de todo lo pasado en esta semana. Hace falta tener esperanza, ilusión por vivir, ganas de seguir adelante y como decía el eslogan de uno de estos anuncios, "es lo que toca".
Feliz semana, que consigamos llegar con las ilusiones intactas como si fuéramos niños. No nos olvidemos de soñar.

lunes, 16 de noviembre de 2015

16 de noviembre de 2015
A pesar de todo…..nos sigue quedando París.



Dicen que lo más preciado que tenemos es la vida, y es verdad, pero ésta hay que vivirla con libertad y sin miedos.
Este fin de semana hemos llorado todos, hemos sentido esa impotencia que solo tenemos cuando sabes que no puedes hacer nada.
El terrorismo más que matar, lo que persigue es crear la desconfianza, el desasosiego, el terror y la confusión.
Diez meses después del atentado de “Charlie Hebdo” nos encontramos con esto, y….la vida tiene que continuar.
No hay causas que justifiquen ningún atentado, ninguna, ni política ni religiosa, ni de ningún tipo.

Hay que ser muy valiente y tener algo por lo que seguir adelante para continuar viviendo después de lo que ha pasado en París.
Pena y tristeza es lo que nos queda a aquellos que no hemos vivido ese terror, y mucha empatía porque es algo que puede pasar en cualquier lugar.
He empezado diciendo que lo más preciado que tenemos es la vida, pero cuando hay personas que no temen por la suya, que no les importa morir por matar, ante eso, ¿qué hacer?
¡Esto es una barbaridad!, no me sale otra expresión.
Los que conocemos París
y nos enamoró, nos quedamos con la melancolía de volver a ver todo como estaba, queriendo pensar que todo lo que ha pasado ha sido un mal sueño.
Pero hay que despertar, y si cabe levantarse con más fuerzas y pensar siempre que la unión hace esa fuerza, que tenemos que andar unidos, tanto para lo bueno como para lo malo, es el único camino para luchar contra el terrorismo.


Au revoir París y
hasta siempre.

martes, 10 de noviembre de 2015

10 de noviembre de 2015
Amores de cine.

Es raro el día que no nos levantamos con una noticia de malos tratos a mujeres por parte de sus maridos. Pero hoy no quiero hablar de forma negativa, me gustaría hacer ver que "los amores de cine" los verdaderos, los que duran y terminan "comiendo perdices", existen y así hay que creerlo.

¿Cual es el secreto de esas parejas? No es que no tengan problemas sino que han sabido alcanzar una convivencia plena y han sabido resolver los inconvenientes que la vida les ha ido presentando.

El noviazgo tiene su sentido,
y es el de ir conociendo al otro, y que el otro te vaya conociendo a ti. Saber acoplarse, aprender a compartir, a resolver, a aceptarse, a convivir, a rectificar, a disculparse, a no sentirse dueño del otro.....en definitiva, a querer.

¿Cuáles serían las claves de la felicidad de estas parejas?

En primer lugar, el diálogo. Hablar, conversar, aprender a mirarse a los ojos y contar lo que se siente, lo que te pasa, a diario, pero frente a frente. A reírse de uno mismo y con el otro, no hay nada mejor para relacionarse de forma sana que el humor. A alegrarse y a disfrutar de los éxitos.

En segundo lugar, respetarnos y respetar. Tiene que ser mutuo. Esto es fundamental en una pareja, como lo es en cualquier relación. Sin respeto no puede haber amor. Nadie debería creer que el que te maltrata, ya sea de palabra como de hecho, te puede querer. El tema de los celos es un capítulo a parte, de que ya hemos hablado en varias ocasiones, pero que merece la pena detenerse.
Hay que saber diferenciarlos de aquellos sentimientos enfermizos, posesivos y que hacen que una persona neutralice a otra.

En tercer lugar, la admiración. Aquella que sentimos por la otra persona desde el principio y que es lo que hace que nos atraiga. Halagar, reconocer, hacer comentarios positivos.....eso es lo que forja la base de una buena convivencia.

En cuarto lugar, perdonar y saber pedir disculpas. ¡Qué difícil es a veces! Pero es fundamental, y dice mucho del que lo hace. No sabemos muy bien la importancia de este paso, 

Y por último, por finalizar, ser flexibles y tolerantes. Darnos una tregua. Hay estudios que dicen que tras 20 minutos se normalizan nuestras funciones fisiológicas después de un enfado. Pues démosnos esos 20 minutos, no es mucho pedir, ¿no?

Tenemos que hacer algo por evitar esta violencia de género, y hay que hacerlo ya, y empezar con los más jóvenes. Enseñarles que la vida en pareja no es algo que tiene que doler, amargarte, hacer que seas otra persona, entristecerte, mantener una lucha constante de poder, ni hacerte sentir inferior. La vida en pareja tiene que hacerte feliz, si no no merece la pena.

Así lo veo yo, y así intento hacérselo ver a mis hijas.

Buena semana,
a intentar inculcar en nuestros jóvenes estos principios, y hacerles ver que la felicidad en pareja es fácil, solo hay que poner...... un poquito de nuestra parte.

martes, 3 de noviembre de 2015

3 de noviembre de 2015
Menos humo….

Esta semana soy yo la que hecho humo, y no precisamente del tabaco. Hablo de la problemática que tenemos los mediadores, y por ende, la mediación.
Soy abogada y firmemente convencida de los beneficios que reporta el utilizar la mediación como medio de resolución de conflictos. Para mi es la mejor forma de empezar a resolver aquellos problemas que tenemos, dialogando, porque somos los que mejores sabemos de ellos y los que mejores podemos encontrarle una solución.
Se dice que hablando se entiende la gente, y es verdad, es la mejor forma, y además, una vez que se aprende, te engancha, y la utilizas en los demás problemas que te vengan a continuación.
Ser mediador en una profesión, como puede ser la de ser abogado, o psicólogo, o médico o albañil. Es una profesión para la que tienes que estar preparado y con la que te propones vivir honradamente, o al menos es lo que yo pensaba.
Soy abogada y mediadora, mi profesión con la que pretendo vivir, cobrando por ello y para lo que me he formado y preparado,  y además soy voluntaria de la Cruz Roja, como algo que hago de forma altruista y de lo que no espero ningún beneficio económico, más que el que me reporta humanamente hablando.

Flaco favor le hacemos a esta profesión tan digna como cualquier otra si seguimos trabajando de forma gratuita a los Ayuntamientos, a los Juzgados, a los Distritos……..Una cosa es darse a conocer, dar charlas informativas para que se conozca, e incluso un periodo de prueba para ver si funciona…..pero de ahí a estar trabajando de forma gratuita años, va un paso.
Por favor, el que tenga la intención de acudir a un curso de especialista o un master de mediación, que por cierto son carísimos y los que los imparten cobran por ello, no lo hacen de forma altruista, que podrían también, ¡digo yo!, no lo haga, porque después no va a poder ganarse la vida con ello, y para lo que cuestan los cursos, mejor invertirlo en algo que le reporte algún beneficio, porque para hacer caridad tenemos otros lugares más adecuados.
Seamos honestos, no sigamos vendiendo humo, que para eso están los indios, aunque al paso que vamos, que ya todos pueden ser mediadores, en nada seremos más jefes que indios, más mediadores que mediados.
Se dan cursos para todo tipo de profesiones, y pregunto ¿para qué?

Del aire no se vive, y eso lo saben muy bien los que se dedican a impartir esos cursos, que es lo que hoy tiene futuro. Pero tengo una idea, propongámosles a todos ellos que nos ilusionan y que después utilizan a los ilusionados para sus trabajos gratuitos que den ejemplo e impartan las clases que venden como la panacea del momento de forma también gratuita, verá cómo se va diluyendo el humo y la magia del momento.
Creamos en nuestra profesión, no más palmadas en las espaldas, no más palabras de alabanza, no más humo…….reivindiquemos la dignidad profesional, creamos en nosotros mismos y busquemos la profesionalización de la mediación, pero cobrando por ello.
No dejemos que se politice este tema, y no todos valen para ser mediadores, ¡ni mucho menos!
Y el que quiera hacer en su tiempo libre algo por los demás, le invito a conocer la Cruz Roja o el Banco de alimentos, hay tanto por hacer……..y de forma gratuita, les aseguro que es muy gratificante.
Buena semana a todos,estrenamos nuevo mes y espero que nuevos propósitos.

lunes, 26 de octubre de 2015

26 de octubre de 2015
Con dos "jotas" de Mújica.


Nunca me había interesado por el presidente de Uruguay hasta que leí un artículo donde hablaban de él y me quedé con dos de sus frases: "vivir sin mirar atrás" y "la vida es siempre porvenir y empieza todos los días".

Ahora a sus ochenta años, José Mújica, sigue siendo una persona interesante, con opiniones sensatas que hacen que sean admiradas por todo tipo de ideologías.

Pasó 15 años en la cárcel durante la dictadura de su país, aislado y sin poder hablar con nadie, y donde empezó a cambiar su visión del mundo. ¿Cual fue su fallo? Quiso cambiar el mundo sin antes cambiarse a él mismo. Eligió el perdón en vez de la venganza, quizás el rasgo que marcaría en el futuro su personalidad.

Presidió como vivió, y lo que más le ofende es la poca importancia que hoy día le damos al hecho de estar vivos. Al igual que su filósofo de cabecera, Séneca, piensa que "no es pobre quien tiene poco, sino quien mucho desea".

Para Mújica uno de los peores errores de nuestra actual modelo social y económico es "la exclavitud del trabajo", nos dice que no vinimos solo a este mundo a trabajar y comprar, vinimos a vivir.
Como político filósofo, aunque él lo niegue, nos dice que mientras más ricos somos más egoístas nos volvemos. ¡Para qué tanto carro, si al final vamos todos al hoyo!

 La vida es un milagro, la vida es un regalo y solo tenemos una.

Así se habla y así se piensa, con do "jotas" de Mújica.

Buena entrada de semana otoñal, y.....a vivirrr que son dos días.

lunes, 19 de octubre de 2015

19 octubre de 2015
Querido Emilio Calatayud......




No hay conferencia que me pierda o artículo que escriba que yo no me lea. Lo sigo y lo admiro. Y lo admiro por decir sin tapujos y siendo a veces "políticamente incorrecto" lo que muchos pensamos. Lo admiro por saber poner límites y dar segundas oportunidades a muchos de los "chavales" a los que tiene que juzgar. Lo admiro por saber aleccionar más que castigar, pero que si tiene que hacerlo, lo hace y a la antigüa.

Dice que antes era más fácil ser padre, y lo secundo, a persar de que se tienen menos hijos hoy. Quizás por la moda de que los padres tenemos que ser amigos de nuestros hijos, cosa casi imposible si no queremos "dejarlos huérfanos" como dice Calatayud, ya que "si me convierto en su amigo no actúo como padre".

Tenemos que empezar a educar sin complejos, y esto, hoy en día, si que cuesta.

Cuando le preguntan si los hijos
tienen obligación de obedecer a los padres, se remite al Código Civil, a su artículo 155 donde viene recogido "que los hijos deben de obedecer a los padres y respetarlos mientras vivan con ellos, al menos hasta los 18 años".  Es un deber legal.

¡Qué pena si tenemos que acudir al deber legal! ¿Y el deber moral? ¿En qué estamos convirtiendo a las familias? Padres que parecen niños y jóvenes que parecen tiranos. Chicas que parecen chicarrones y padres asustados en sus propias casas. ¿Dónde los límites?¿Dónde la racionalidad?¿Dónde el sentido común?¿Dónde.......?

Desde el mismo momento que confundimos un cachete con un caso de malos tratos y lo elevamos a un asunto de estado vamos mal. La vida no puede ser un reality show donde todo tiene que estar medido al centímetro, y si un niño hace tal cosa es porque algo en su interior hace que lo haga y la sociedad es culpable por ello, y para que no coja un trauma entonces lo dejamos estar, y.....¡Dios!, si lo hace es porque es un niño y para eso estamos los padres, para enseñarles lo que está bien y lo que no, y si hay que corregirlos una y otra vez, pues se hace, no va a pasar nada malo.

Otro tema que me parece importantísimo es el de la botellona,
y comparto totalmente lo que dice el Juez Calatayud, "se prohíbe fumar, pero no pasa nada viendo como lo menores se emborrachan haciendo botellón". ¿Hola?, como suelen decir hoy los jóvenes, ¿esto tiente sentido?

¿A qué se le tiene miedo? Nos cargamos el futuro de nuestros hijos, su salud mental y física, el normal desarrollo afectivo y emocional con los demás, el saber apreciar lo que está bien, el valorar el descanso, la propiedad pública y los derechos de todo ciudadano, todo por no saber enseñar como haría un "buen padre de familia". Todo no vale, y si esto no lo tenemos claro los padres, ¿cómo lo van a tener claro nuestros hijos, y los hijos de nuestros hijos?

Hay que aprender a decir "no" y a educar, pero con seguridad, sin caer en la trampa de la "joven democracia" que asemeja esto a la dictadura y al autoritarismo. Por favor.

La autoridad tiene que emanar de la familia, si un menor no respeta a su padre, ¿a quién va a respetar?

Buena entrada de semana,
y a los que somos padres, a ponernos las pilas, y como suelo decir "cuando seas padre comerás huevos", pues esta es nuestra hora, ya le llegará a ellos la suya también, pero hasta tanto....



martes, 13 de octubre de 2015

13 de octubre de 2015
Ponte en mi lugar. Conecta conmigo.



La dignidad o "cualidad de digno" se traduce como valioso y hace referencia al valor inherente al ser humano en cuanto ser racional. Tener dignidad podríamos decir que es sentirnos respetados, comprendidos y aceptados.

"Ponte en mi lugar, conecta conmigo" es el eslogan que este año se ha escogido para celebrar el Día Mundial de la Salud Mental que se ha celebrado el día 10.
Padecer una enfermedad no te hace menos humano, por esa razón este año este Día está centrado en la dignidad.
Con  este eslogan se pretende llamar a la empatía de la sociedad para con las personas con problemas de salud mental.
¿Qué es lo que hace tener rechazo o miedo a este tipo de personas?El desconocimiento. Por lo que en este Día lo que se pretende es lanzar un mensaje de esperanza, empatía e inclusión para que todos podamos aprender a conocer esta realidad y convivir con ella sin temores ni prejuicios.

El artículo 1 de la Declaración de los Derechos Humanos afirma que "todos los seres humanos nacen libre e iguales en dignidad y derechos". Por ello es necesario ofrecer mejor apoyo y cuidados a las personas con trastornos mentales.

"Me da vergüenza invertir tanta energía en obsesionarme conmigo misma y con mi salud mental, mientras otras personas la invierten en relaciones felices y constructivas y en otras cosas productivas".
"Me da vergüenza pasar tanto tiempo intentando manejar este trastorno, siendo consciente de las señales de advertencia y acordándome de tomarme la medicación".
"Me da vergüenza estar pensando constantemente en mi enfermedad incluso en los periodos buenos".

Estas son frases dichas por personas que padecen alguno de estos trastornos y son dignas de ser analizadas.

Cuando se tiene una enfermedad mental los pensamientos racionales son reemplazados muy rápidamente provocando que el que las padece pierda la dignidad, cosa que puede interpretarse como incompetencia, irresponsabilidad o inmadurez, entre otros casos.

Pongámonos en su lugar, nadie escoge nacer con un tipo u otro de enfermedad. Y siendo realistas, ¿quién no tiene algún complejo, tic, manía,fobia, trastorno, rareza......?

Ojalá este Día sirva para que con esta información nos demos cuenta que vivimos en una sociedad llena de personas diferentes, ni mejores ni peores, con problemas, carencias, sentimientos encontrados, miedos......pero todas con derecho a ser tratadas con dignidad.

Y yo lo que digo es,como ya alguien dijo en su momento, que el que esté libre de alguna rareza.......tire la primera piedra.


Buena semana a todos, y lo bueno será cuando este Día no se tenga que celebrar. Perdámosle el miedo a vivir.