"... apasionados de la palabra, de los sentimientos... De todo aquello que hace que la vida sea mejor. Con gusto mediador"
Hola:
Somos Sebastián García y Carmen Sánchez, y en esta segunda etapa de nuestras vidas surge la idea de crear "Con Actitud y Media". Psicólogo y abogada que tienen como nexo en común la pasión por la mediación, la ilusión de hacer que la vida sea mejor con la palabra y la cultura del acuerdo.
Este es nuestro momento de "desaprender para aprender", como tantas veces nos ha dicho nuestro querido Javier Alés Sioli, y nos encantaría compartirlo con todos vosotros, con toda la ilusión del mundo. Intentaremos desde una frase diaria, comentar, contar... reflexionar en definitiva para hacer que "cada día cuente". Contaros también nuestros logros y nuestros avatares. Os esperamos.

martes, 25 de marzo de 2014

25 de Marzo de 2014
Fumando espero......


Vivimos con prisas, de un modo que nos aleja de nuestros ritmos y ciclos naturales. Hacer las cosas en el momento oportuno, sin apresurarnos, sin estar pendientes siempre del reloj, nos libera de la frustración y nos permite ser más felices. 

La verdadera libertad se basa en el autocontrol, que nos permite fluir sin que la impaciencia y las distracciones nos desvíen del presente.
"Quienes se controlan a sí mismos pueden alcanzarlo todo", afirmaba un sabio chino.

La sociedad de consumo estimula la gratificación inmediata de nuestros deseos e incita por tanto a la impaciencia.
Pero una vida plena requiere aprender a demorar la gratificación. La capacidad de saber esperar es esencial para una buena vida.

El contrasentido de nuestros esfuerzos por apresurarnos y ganar tiempo lo refleja muy bien Michael Ende en su novela Momo. Allí describe una ciudad que  ha sido invadida por hombres vestidos de gris que proclaman "el tiempo es oro: ¡No lo gasteis!. El tiempo es dinero: ¡ahorradlo!
Son muchos los que se dejan seducir por los hombres de gris, pero por más que intentan ahorrar tiempo siempre se les escapa. Según Ende "la vida radica en el corazón humano, y cuánto más tiempo ahorraba la gente , menos tenía".

Vivir con prisas, pendientes del reloj, es frustrante, estéril.
Antes de la invención del reloj mecánico, en el s.XIII, el tiempo no se concebía de manera abstracta y lineal, sino que respondía a los ciclos del cosmos, siendo las horas de los días de verano más largas, que las de invierno, sucediendo al revés con las horas de las noches.

No podemos hacer que una flor crezca más rápido tirando de ella, iríamos contra su naturaleza y la romperíamos.La naturaleza nos enseña que cada proceso tiene su tiempo y tiene su ritmo. ¡Aprendamos de ella!




Así como Sara Montiel decía en su canción, "fumando espero.....", sepamos esperar,  todo llega, cada cosa en su momento, y como decía Michel de Montaigne, "Cuando bailo , bailo; cuando duermo, duermo". 





Ahora esa espera la haríamos con un cigarro electrónico, pero bueno......todo sea por la salud.




2 comentarios:

  1. Las horas que son y yo sin poder dejarte un comentario. Hay veces que los relojes deberían desaparecer. El autocontrol del que tú hablas, la ilusión de mi vida.
    Yo esperaré fumando, pero ten por seguro que con cigarro electrónico noooooo
    Hasta mañana guapísima, prometo ser más tempranero.

    ResponderEliminar
  2. Jajajaja......y yo las horas que son y sin poder contestar. Ni contigo ni sin tí, esa es la relación que tenemos con el tiempo.
    Con cigarro o sin él, lo importante es aprender a tener paciencia, la inmediatez a la que se nos está acostumbrando, nos hace el tener cada vez menos capacidad de espera. Y eso nos provoca frustración.
    Hasta mañana, yo también intentaré contestar mañana más temprano.

    ResponderEliminar