10 de Enero de 2014
La carrera de Sapos.
Hay tantas veces en la vida que antes de empezar algo y demostrar que podemos hacerlo, hay alguien que te hace ver, siempre por tu bien, que es imposible, que no tienes capacidad, que para qué, que eso no lo hace nadie, que es muy arriesgado, que se sale de los normal....en fin, que te quitan las ganas de hacerlo o bien te convencen de que eres incapaz de llevarlo a cabo.
En esta Fábula se da una fórmula para que esto no nos pase. Hagamos como este sapo.
Erase
una vez una
carrera de sapos en el país de los sapos.
El objetivo consistía en llegar a lo alto de una gran torre que se
encontraba en aquel lugar.
Todo estaba preparado y una gran multitud se reunió para vibrar y
gritar por todos los participantes.
En
su momento se
dio la salida y todos los sapos comenzaron a saltar. Pero como la
multitud no creía que nadie llegara a la cima de aquella torre pues
ciertamente, era muy alta, todo lo que se escuchaba era: “no
lo van a conseguir“,
“qué lástima, está muy alto, es muy difícil, no lo van a
conseguir“.
Así
la mayoría de los sapitos empezaron a desistir. Pero había
uno que persistía,
pese a todo, y continuaba subiendo en busca de la cima.
La
multitud continuaba gritando: “es muy difícil, no lo van a conseguir“,
y todos los sapitos se estaban dando por vencidos, excepto uno que
seguía y
seguía tranquilo cada
vez con más fuerza.
Finalmente
fue el único que llegó a la cima con todo su esfuerzo.
Cuando fue
proclamado vencedor muchos fueron a hablar con él y a preguntarle
como había conseguido llegar al final y alcanzar semejante proeza.
Cual sería le sorpresa de todos los presentes al darse cuenta que
este sapito era....sordo.
MORALEJA:cuando te convenga, hazte el sordo, saldrás ganando.
Mandeeeee.......
Cada uno tiene que convencerse por sí mismo de lo que es capaz de hacer. Que nadie decida por tí
ResponderEliminarY si alguien lo hiciera, con hacerse el sordo......
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