"... apasionados de la palabra, de los sentimientos... De todo aquello que hace que la vida sea mejor. Con gusto mediador"
Hola:
Somos Sebastián García y Carmen Sánchez, y en esta segunda etapa de nuestras vidas surge la idea de crear "Con Actitud y Media". Psicólogo y abogada que tienen como nexo en común la pasión por la mediación, la ilusión de hacer que la vida sea mejor con la palabra y la cultura del acuerdo.
Este es nuestro momento de "desaprender para aprender", como tantas veces nos ha dicho nuestro querido Javier Alés Sioli, y nos encantaría compartirlo con todos vosotros, con toda la ilusión del mundo. Intentaremos desde una frase diaria, comentar, contar... reflexionar en definitiva para hacer que "cada día cuente". Contaros también nuestros logros y nuestros avatares. Os esperamos.

martes, 7 de enero de 2014

7 de Enero de 2014
¡¡¡ATENCIÓN, ATENCIÓN!!!






No se si en otro artículo he comentado que me encanta Jorge Bucay y su revista de psicología positiva, y más si cabe, escucharlo.

Pues en una de ellas, leyendo unos de sus artículos descubrí a Daniel Goleman.


Según él, la excelencia es directamente proporcional a la capacidad de atención, una capacidad que actualmente se ve continuamente asediada por multitud de comunicaciones electrónicas y por el ritmo acelerado e intenso de la vida contemporánea.

Por otra parte, una buena capacidad de atención nos permite navegar por las emociones de manera positiva.

Nos dice, que la atención es como un músculo que más se desarrolla cuanto más se ejercita.

Hoy, la atención se encuentra asediada por lo artilugios tecnológicos que continuamente nos invaden con mensajes y noticias. Por ello, Goleman considera que la atención y la información son antagónicas, de forma que cuanto mayor es el número de estímulos informáticos, menos es la atención que podemos prestar a cada uno.

Por este motivo, sigue diciendo Goleman, que ésto multiplica nuestras relaciones insustanciales (las relaciones virtuales) a la vez que tienden a reducirse nuestras relaciones sustanciales (en las que podemos mirarnos a los ojos y abrazarnos).

Todo esto hace que en los últimos años esté cayendo  la comprensión lectora de los alumnos. Es como si nuestra capacidad para profundizar y desarrollar pensamientos complejos y sutiles, se viera erosionado por la avalancha de mensajes breves y simples de los dispositivos tecnológicos.

Uff!!!! Esto me hizo reflexionar. Nada de lo que leí me resultaba ajeno, pero hasta este momento no caí en su verdadera importancia.

Yo siempre he defendido las relaciones personales, en las que disfrutas de ver a la otra persona y mirarle a los ojos, los cuales te dicen siempre más que lo que puedan expresar por escrito en mensajes de whatsapp.


Es difícil, sobre todo con las generaciones de los más pequeños, desarraigarlos de todo este torbellino de nuevas sensaciones informáticas. Pero sí podríamos dosificarlas, de manera que aunque se manejen dentro de ese mundo que atrapa a grandes y pequeños con manos de hierro, les hagamos ver el significado de las relaciones, de las de quedar y mirarse  y escucharse, y darse su tiempo sin prisas, sin más información o mensajes  que el que les esté dando la persona que tienen en ese momento delante.

Sin quererlo, estamos convirtiendo a esta juventud, en la primera generación  de la historia que crecen dedicando más tiempo a las pantallas que a la auténtica relación presencial con las personas.

Da pena, pero es así. Y no sólo los jóvenes, cada vez más gente adulta se ve envuelta  en este maratón de tecnologías.

Yo misma, que las odiaba, ahora me encuentro algunas veces saturada, y no se dónde he leído ya la información, si por whatsapp, por facebook, por twitter, por el periódico.....
.y eso que no soy de las más activas. Todavía me considero principiante en muchas de ellas, dentro del elenco de personas que me rodean.(gracias a Dios).

Me sigue gustando el contacto con la gente, el cara a cara con café por delante, y aquél en el que a veces no hace falta ni decir palabra porque con la simple mirada nos entendemos.



¡¡¡Para algunas cosas sigo siendo una antigua, pero....no se si me quiero modernizar tanto!!!.


5 comentarios:

  1. Añado algo más a lo que comentas. Actualmente cuando estamos en esa situación de cara a cara con café por delante, también se ha deteriorado con respecto a hace algún tiempo. Ahora también caemos en estar pendientes del móvil, llamada, whats app, mensajes etc... que hacen que no prestemos toda la atención a la persona con la que vamos a estar a lo mejor sólo media hora. Deberíamos de ser capaces en esas circunstancias de apagar el movil y dedicar toda la atención a la persona con la que estamos.

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    1. Llevas toda la razón del mundo. Y si, deberíamos apargalo y dedicarnos a la persona que tenemos en frente. Se te pone cara de tonto cuando están físicamente con alguien y te deja colgado para contestar algún mensaje.

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  3. Estoy contigo, Carmen, cuando dices que no sabes si quieres ser tan moderna. Por què iba a fallar una tradiciòn tan milenaria como la de comunicarse a través de los cinco sentidos.

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    1. Es que es lo mejor que hay. El contacto con la otra persona, mirarla a los ojos, reirte con ella....es de lo más saludable y cansa menos que las relaciones por estos métodos. Por cierto, a ver si te vemos el pelo caballero.

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